Como ayer

Hace unos días, circulando por tierras de la provincia de Ávila, esta escena llamó tanto mi atención que no pude por menos de parar y acercarme para saludar a estos labriegos y preguntar si preparaban la tierra para sembrar patatas, por ejemplo. -Sí, para eso es; ¿ entiende usted de estas cosas? – Soy de pueblo, les dije, y algo recuerdo de mi infancia. - ¿De qué pueblo? – De La Zarza en la provincia de Salamanca, que está cercano a Portugal, en la zona de las Arribes ¿ Las Arribes ha dicho? – Sí, sí, - El año pasado los jubilados fuimos de excursión por aquella zona y nos gustó mucho. Es muy bonito todo aquello -Como estas tierras suyas de las estribaciones de Gredos- ….Pero allí tienen mejor clima, mire cómo las heladas de las dos noches pasadas nos ha dejado todo- y me señalan los frutales en flor y los nogales del fondo que los ha dejado negritos. -Pues no crean, por allí, por mi pueblo, las heladas también han hecho algo parecido- Una pena.
De la pareja de borriquillos uno era joven y el otro viejo y con mataduras -como yo, dijo el más mayor- y el acompañante con una cuerda a manera de rienda iba dominando y frenando el ímpetu del animal más joven porque avanzaba más que el viejo y se torcía en la trayectoria.
¿Puedo hacerles unas fotos?. -Las que quiera- me dijeron. Ha sido un placer hablar con usted que comprende esto-. Además, -añadió uno de ellos- con este ejercicio no necesitamos ir a clases de gimnasia.
Hasta otra ocasión, que les vaya bien.
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